Tiberio López Cardona. Responsable Área de Peritación de Mobius Group
Han pasado algunos años desde que la llegada del perito al taller iniciara el proceso de las reparaciones. Hoy, con las tecnologías de las que disponemos y las nuevas tipologías de vehículos, los peritos hemos visto evolucionar y transformarse nuestro oficio. La formación constante es fundamental para dar respuesta a las nuevas necesidades de las flotas.
Si alguna vez has tenido un percance con el coche, entonces seguro que has entrado en contacto con un gremio de profesionales muy especial del que formo parte: los peritos. Nuestras decisiones son muchas veces trascendentales y, por eso, deben ir siempre acompañadas de una gran experiencia técnica. La labor de los peritos es esencial para la movilidad.
Nuestro oficio, en su día tan artesanal, cada vez cuenta con más herramientas tecnológicas que facilitan la tarea y que suman precisión a la hora de evaluar los daños que ha sufrido un coche y calcular el tiempo que tardará la reparación.
Han pasado algunos años desde que los talleres esperaban con ansia la llegada del perito. Nosotros dábamos luz verde al inicio de una reparación y éramos clave para calcular la carga de trabajo de los técnicos y cuantificar los ingresos de la semana.
Hoy el perito llega al taller pero de muy diversas formas gracias a las herramientas de peritación digital, internet, móviles… La peritación digital ha cambiado el proceso que ahora lo inicia el taller enviando las fotografías con las que los peritos, detrás de las pantallas, decidimos los pasos a seguir. Así se reducen de manera más que notable los tiempos de reparación.
También la peritación en remoto, con una cámara mostrándonos en video los detalles que nosotros necesitamos para nuestro informe, facilitan que el perito no se desplace y pueda ver todo lo que necesita para peritar. La peritación digital ha sido, sin duda, una de las grandes evoluciones de nuestra profesión.
La llegada al mercado de los vehículos híbridos y eléctricos ha significado un nuevo cambio para los peritos. Nos hemos formado para poder trabajar y peritar los daños en este tipo de vehículos. No solo evolucionamos, sino que nos transformamos de la mano de la movilidad.
En la actualidad existe una gran diversidad de flotas; tantas, como la cantidad de nuevos servicios generados por la movilidad del siglo XXI. Esta variedad de servicios genera también una multiplicidad de necesidades que han hecho que los peritos ya no seamos solo evaluadores de daños, sino que somos gestores integrales de la reparación. Hoy, realizamos órdenes de recambio, hacemos seguimiento a la reparación y atendemos el control de calidad en la entrega. Hoy, un buen perito es el mejor socio de un jefe de flota ya que podemos dar referencias sobre el estado de las reparaciones y la salida de las unidades del taller. Gestionamos una información de vital importancia para las flotas.
El oficio del perito seguirá mejorando con el desarrollo de nuevas tecnologías con el objetivo de estar a la vanguardia para dar la talla a los desafíos que cada día nos brinda la nueva movilidad.